Eidico participó de un nuevo encuentro del Club IFREI para conversar sobre paternidad y trabajo. Te compartimos casos concretos, y las habilidades que pueden retroalimentarse en el ámbito profesional y familiar.

Hace unos días, el Centro de Conciliación Familia y Empresa (CONFyE) de IAE Business School organizó un nuevo encuentro con las empresas miembros del Club IFREI y otras organizaciones invitadas, titulado “El protagonismo de una nueva paternidad: dilemas visibles y recompensas invisibles”.

Eidico forma parte del Club IFREI desde hace varios años, en su propósito por seguir enriqueciendo al valor Personas y Familia. Mateo Salinas, gerente general de Eidico, participó de este evento, y compartió el panel junto a Luciano Sara, de Promedon; Justo Nazar, de Sanofi; y Reynaldo Rivera, profesor de Comunicación de la Universidad Austral como moderador.

“El rol del padre ha resultado en un mayor involucramiento en la crianza de los chicos y en las tareas domésticas, y el contexto de la pandemia ha acentuado este fenómeno”. El evento comenzó con estas palabras del Prof. Rodolfo Rivarola, de IAE Business School.

 

¿Cómo se enriquecen mutuamente familia y trabajo?

Con una exposición del investigador Marc Grau i Grau, el público fue invitado a reflexionar sobre algunas preguntas relacionadas a la relación entre paternidad y trabajo.

  • ¿Se puede ser un excelente trabajador y un excelente padre?
  • ¿Qué aprenden los padres en su trabajo que puede tener un impacto positivo en casa?
  • ¿Puede desarrollarse plenamente la vida haciendo las dos cosas?
  • ¿Cuál es el rol de las organizaciones?

Entre quienes respondieron sobre la importancia de su trabajo, se destacó el valor que éste tiene en el desarrollo personal. Por otro lado, se habló sobre la razón económica, para sustentar a la familia.

Sobre ésta, se destacó que es “el motor de la vida”, donde se desarrollan los valores y los primeros afectos.

Entonces, ¿pueden familia y trabajo enriquecerse mutuamente? Habilidades como la gestión de personas, la resolución de conflictos y la comunicación pueden adoptarse en el trabajo y aplicarse en casa, y viceversa.

 

El caso Eidico, en primera persona

Luego, fue el turno de los panelistas. Cada uno compartió su testimonio sobre paternidad y empresa.

Mateo Salinas compartió el caso de Eidico, como empresa que siempre ha buscado el desarrollo personal de cada uno, y un ambiente familiar para trabajar. “Eidico es un lugar que busca que todos se sientan parte”, comenzó.

“Hoy, más de doce mil familias viven en los barrios de Eidico. Siempre quisimos darle a Eidico ese espíritu familiar; incluso invitamos a amigos a trabajar”.

Trabajar con amigos es una de las características que identifica a Eidico, muy vinculada al clima familiar de la empresa. A su vez, requiere ejercitar cualidades que retroalimentan familia y trabajo. “Trabajar con amigos nos obliga a profundizar en el diálogo. La regla primera es aprender a dialogar. Implica aprender a dar feedback sin perder la relación”, explicó Mateo.

 

El lugar de la familia

Mateo también habló de su visión sobre cómo, muchas veces, los padres no quieren tomarse la licencia de paternidad porque tienen miedo de dejar su lugar y asumir el rol de padre.

Compartió una oportunidad en la que conversó con quienes trabajaban en Eidico sobre cuánta energía le dedicaban a su trabajo, que no le estaban dedicando a su familia. “Me di cuenta de que uno imprime herramientas de liderazgo y energía en el trabajo, que no siempre implementa en su familia”. Esos testimonios lo hicieron reflexionar sobre la importancia de que familia y trabajo no tironeen.

“En Eidico festejamos el Día del Niño, Navidad, el Día del Amigo, el Día del Padre y el Día de la Madre, y en todos los festejos integramos a la familia de alguna manera. Entre Navidad y Año Nuevo la semana es libre”. Prácticas como éstas son las que otorgan a cada persona que trabaja en Eidico la posibilidad de compartir más tiempo con sus familias, e integrarlas a su vida profesional.

 

Licencias por paternidad y maternidad

Justo Nazar, director regional de RR.HH. en Sanofi, también compartió su experiencia. “Nos dimos cuenta de que la gente que estaba más contenta, tenía mejor rendimiento en el trabajo. Comenzamos a preguntarle a los empleados sobre sus preferencias. Su respuesta fue que las empresas les dieran más importancia a las familias”.

Nazar explico que hace dos años, en Sanofi, se implementó una licencia parental paga de seis meses, tanto para hombres como para mujeres. “Tuvo un impacto muy alto, y a nosotros nos aseguró que las mujeres no se vieran impactadas por las licencias maternales, ya que ahora es igual para todos”.

Por otro lado, internamente buscan la manera de darle exposición a alguien de la empresa para que en ese momento pueda desarrollarse en el lugar de reemplazo de la persona que está de licencia.

 

 

La pandemia y sus consecuencias

Luciano Sara, gerente de RR.HH. de Promedon, habló sobre el impacto de la pandemia. “El home office, de cierta manera, tuvo un impacto positivo en los headquarters, porque en el interior, la gente es más propensa a tener espacios más grandes para trabajar cómodamente. Así como también, las distancias son cortas para poder realizar otras actividades, como llevar a nuestros hijos al colegio”.

La cultura interna de Promedon se rige por el principio de estar cerca de la gente. Y fue un desafío poder mantenerlo a la distancia. “Hoy en día, buscamos la forma de estar cerca, gracias a los protocolos que se encuentran disponibles. Antes, el home office era una aspiración, y ahora es una realidad. Y hoy nos encontramos en transición”.

 

Trabajo en equipo

Con más de 60 participantes de la Argentina y de otros 9 países de la región, CONFyE nos enriqueció una vez más con estas conversaciones, y la posibilidad de compartir experiencias sobre familia y trabajo.

 

También pueden interesarte…

¿Qué hace que una empresa sea atractiva para trabajar?

¿Qué valoran los argentinos tras el aislamiento por Covid-19?

Cómo generamos vínculos entre vecinos