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La expectativa de vida se estira sin pausa. Es común ver abuelos y abuelas de noventa años o más. Claro que más años significa más tiempo de etapa “pasiva”, viviendo de una jubilación o de una pensión. ¿Nos preparamos adecuadamente desde jóvenes para este cambio?
De acuerdo a una encuesta realizada por Mercer, consultora global en recursos humanos que trabaja junto a las empresas sobre estrategias para la planificación patrimonial, no estamos yendo por el camino más seguro. El relevamiento se hizo en doce países (incluida la Argentina). El primer resultado indica que el 88% de los adultos se siente responsable por sus ingresos jubilatorios a futuro. Aún así, dicen no haber realizado ningún cálculo financiero de ahorro para la jubilación.
“La actual expectativa de jubilación a cierta edad ya no existe. Como las personas vivimos más y trabajamos más, hay que olvidarse del concepto de jubilación tal como lo conocemos hasta ahora. Para vivir bien más adelante es necesario actuar ahora. Y la responsabilidad de actuar nos incumbe a todos, tanto al sector privado y público como a los particulares”, postula Ana María Weisz, directora de Wealth de Mercer. “Hay que actuar hoy. Hoy es el pasado del futuro”, concluyó.
En sus puntos más relevantes, la encuesta señala lo siguiente.
- Se espera que las personas vivan entre 15 y 20 años jubilados. Pero sin una mejor planificación, en muchos casos sus gastos superarán sus ahorros.
- La edad esperada de jubilación ya no existe porque la gente está trabajando más años, ya sea por elección o por necesidad económica. Más de dos tercios (68%) de los encuestados, espera seguir trabajando en cierto grado o no jubilarse nunca.
- El mayor segmento de la fuerza laboral (la generación del milenio o los millennials) cambia de trabajo con mayor frecuencia, lo que también tiene impacto en los ahorros.
- Las mujeres enfrentan diferencias por género en cuanto a desigualdad salarial y continuidad laboral; y los trabajadores independientes o informales se las tienen que arreglar casi solos.