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Nuevas tendencias toman protagonismo en el mundo inmobiliario. Inmuebles pequeños vienen a cubrir la demanda de los más jóvenes y se complementan con espacios de coworking. Y familias que se amplían buscan viviendas a costos razonables.
Dentro del contexto económico actual, en el sector de la construcción hace foco en la necesidad de ser creativos para reformular y readaptar proyectos. Esto implica ceñirse a las necesidades de una demanda diferente, con menos fondos o que necesite más tiempo para el repago, pero que no se paraliza.
Mini-departamentos, nueva tendencia
Dentro de este nuevo contexto, una tendencia que se impone es la de las micro-viviendas. Se trata de unidades que muchas veces no superan los 18 m2. Tienen todo lo necesario en confort y tecnología para vivir. Y están destinadas, principalmente, a los jóvenes, que buscan su primera opción de independencia. Este sistema es bastante novedoso en la Argentina. Pero hace décadas que se utiliza en las principales ciudades de Europa y de Asia. Allá, el valor de la tierra y la escasez imponen modelos pequeños.
Hoy en día, hay menos tierras aptas para la construcción de edificios en la Ciudad de Buenos Aires. Pero, sobre todo, el metro cuadrado se volvió muy caro y se imponen nuevas ecuaciones.
Predial es una de las firmas pioneras en el desarrollo y comercialización de estos pequeños monoambientes. De acuerdo a datos de la empresa, ya llevan vendidas más de 500 unidades distribuidas en 14 edificios. Estos se encuentran en los barrios de Paternal, Almagro, Flores, Montserrat y Balvanera, entre otros. “La clave de este formato está en el diseño funcional de las unidades y en el equipamiento de calidad y excelentes terminaciones, que permiten modificar el espacio según las necesidades del día”, señaló recientemente en una entrevista con el diario La Nación Pablo Brodsky, director comercial Predial.
Para trabajar en casa
Otra característica de estos departamentos es que hacen gala de muy buenos espacios comunes, que complementan las funciones de los mínimos metrajes de las unidades.
Subiéndose además a tendencias como el coworking –otro formato que avanza-, tienen zonas en las que los propietarios o inquilinos que hacen home office o son emprendedores pueden trabajar con comodidad. Lo mismo sucede con espacios especiales para reuniones con amigos, que serían imposibles en menos de 20 m2. SUM, cocina, zona de parrilla y laundry son amenities comunes. Así también, pileta y solarium.
Para familias que se agrandan
Otro segmento del Real Estate que pide pista y productos adaptados a la nueva realidad económica es el opuesto al de los mini-departamentos.
Se trata de casas, departamentos o PH que satisfagan la necesidad de familias de clase media que tienen que saltar a un espacio más grande porque la familia creció. En este punto, tanto los empresarios como los consultores que escuchamos en los últimos encuentros sectoriales remarcan los siguientes puntos.
- El Gran Buenos Aires ofrece mejor posibilidad de lograr una buena propuesta costo/calidad. Esto es así porque la incidencia del valor del terreno sobre el proyecto es menor, y permite encarar viviendas de más metros sin que se disparen los valores por m2.
- “En la medida en que la economía vaya mostrando signos de ordenarse, habrá nuevas oportunidades para nuevos desarrollos, especialmente los orientados a la clase media. Los desarrolladores deberán redirigir sus estrategias. Que se mantengan las líneas de financiamiento tanto bancario como de los propios desarrolladores será clave”, manifestó en un análisis sectorial Gustavo Lambías, vicepresidente de la Asociación de Empresarios de la Vivienda (AEV)
- Para cumplir con las necesidades de la clase media, otra tendencia que deberá calar hondo en el sector es el uso e implementación de nuevas tecnologías. “Tenemos una gran asignatura pendiente en la industria de la construcción, pero también en toda la cadena de valor del Real Estate. Se trata del uso de más y nuevas tecnologías, que están disponibles tanto desde el punto de vista constructivo como de la comercialización, y que permiten reducir costos”, remarcó Tabackman en el último Congreso de Arquitectos que se realizó en Buenos Aires.
- Los proyectos de tipo comunitario, de media y baja densidad, en los que los gastos comunes pueden compartirse, marcarán el calendario.