La Secretaría de Vivienda y Hábitat acaba de calificar como “tradicional” a las obras hechas con nuevas tecnologías constructivas. Esto facilitará las aprobaciones municipales. Además, es el puntapié necesario para que puedan participar sin complicaciones burocráticas en obras públicas. Los expertos destacan la velocidad en la ejecución, la calidad de la obra y de las terminaciones, y el excelente aislamiento térmico y acústico de la construcción en seco.

Aires frescos van soplando en un sector tan tradicional como es la construcción. Desde hace tiempo, la industria viene incorporando nuevas tecnologías, nuevos métodos de trabajo y combinando materiales de última generación con otros considerados commodities. Pero 2018 podría resultar un punto de inflexión para el despegue y consolidación en el país de los sistemas constructivos más modernos: los que se hacen 100% en seco, que ganan terreno en todo el mundo.

Mediante una resolución de la Secretaría de Vivienda y Hábitat, dependiente del Ministerio del Interior, publicada el 2 de febrero en el Boletín Oficial, se puso a la construcción en seco en pie de igualdad con la llamada “construcción tradicional” o  “húmeda”.

Hablamos con la presidenta del Instituto de la Construcción en Seco (INCOSE), Corinna de Barelli. Nos explicó los alcances de esta medida y las ventajas de la construcción industrializada, tanto desde el punto de vista económico como ecológico y ambiental.

¿Qué es exactamente la construcción en seco y cuáles son sus principales ventajas respecto de los sistemas tradicionales?

Una vivienda industrializada implica una modalidad constructiva moderna. Sus productos y procesos de ejecución se encuentran estandarizados bajo exigentes normativas nacionales e internacionales. La construcción industrializada, o construcción en seco, como el steel frame o steel framing, es una técnica evolucionada que se caracteriza, en primera instancia, por su rapidez de ejecución. Además, tiene ventajas muy valoradas. Éstas son mejor aislamiento acústico y térmico, la posibilidad de lograr una obra limpia (sin escombros), y un inmejorable nivel de terminación en todas las superficies.

¿Por qué es importante la Resolución de de la Secretaria de Vivienda y Hábitat?

Lo que hace la Resolución es declarar como “tradicional” a las obras  con construcción en seco del tipo steel framing. Esto significa que los desarrollistas ya no deberán lidiar con trámites burocráticos en los municipios o barrios cerrados para poder autorizar una obra con esta tecnología constructiva. Simplemente se deberán cumplir los mismos requisitos que los exigidos para una obra húmeda. Estos son planos de proyecto, cálculo estructural y –en la Provincia de Buenos Aires– certificación del cumplimiento de la Ley 13.059 de Acondicionamiento Térmico, que para el sistema steel framing es fácilmente alcanzable. 

¿Esto abre o facilita la posibilidad de presentarse a licitaciones públicas?

Sí. Hasta el momento, la exigencia de un certificado de aptitud técnica hacía engorrosa esta posibilidad. Una gran cantidad de viviendas en distintas provincias de la Patagonia y los Jardines de Infantes de este último periodo se han ejecutado con steel framing. Sin embargo, este sistema aún no podía mostrar su potencial en la obra pública. Sin dudas, se abre un nuevo escenario para nuestro sector, en igualdad de condiciones. Es importante mencionar que la eliminación del certificado de aptitud técnica propiciada a partir de esta resolución no es en absoluto una eliminación de exigencias técnicas para con el sistema.

En la Argentina, a menudo el término “viviendas industrializada” se relaciona  con construcciones de baja calidad, como las prefabricadas. ¿Qué las diferencia?

La construcción en seco no guarda relación alguna con las viviendas prefabricadas. Estas últimas son viviendas para soluciones transitorias, que no reúnen las características que mencionamos antes. Es decir que no pueden asegurar la durabilidad que sí tienen las ejecutadas con construcción en seco.

Para alguien que está encarando la construcción de su casa, ¿cuáles son los principales beneficios del método en seco?

Un punto muy importante es el ahorro a futuro que tendrán en los servicios de electricidad y gas. Esto se da porque esta tecnología permite construir muros muy eficientes, capaces de generar un confort interior sin forzar el uso de equipos de calefacción o refrigeración. Además, mejora los tiempos de ejecución. Esto es consecuencia de que gran cantidad de tareas pueden realizarse en forma simultánea y una vez cerrada la estructura. Otro dato es que no es necesario construir paredes que luego se romperán para permitir el pasaje de instalaciones. Además, al no utilizarse agua en el proceso, la vivienda puede habitarse desde el minuto cero de estar terminada. Y no es necesario convivir con el polvillo, la humedad y los tiempos de fragüe típicos de la construcción húmeda.

Y las empresas constructoras o desarrolladoras, ¿qué ventaja obtienen?

Los desarrollistas pueden ofrecer proyectos más tentadores desde el punto de vista del aprovechamiento de espacios. La eficiencia de los muros está dada en espesores menores a los que utiliza la obra húmeda para llegar al mismo nivel de confort. Esto se traduce en mayor superficie útil y mejor flexibilidad para el diseño. Además, la rapidez de ejecución -de un tercio del tiempo que lleva la obra húmeda- permite un recupero de la inversión en plazos más cortos. Esta velocidad hace a este tipo de construcción especialmente atractiva para inversores.

En términos económicos, ¿es más caro construir en seco que por el sistema tradicional de mampostería?

El costo por metro cuadrado de la construcción en seco es más económico que el de la obra húmeda. Su elección conlleva todas las ventajas que venimos mencionando. Éstas son rapidez de ejecución, ahorro de energía, confort interior, tecnología, obras limpias y cuidado del medio ambiente, factibilidad de ejecución incluso en climas adversos, entre otras.