Por Mónica Fernández
Marzo suele ser un mes complicado para el bolsillo porque no solo arrastramos los excesos de las vacaciones –con resúmenes de tarjetas de crédito- sino que se “reincorporan” a la agenda de pagos y obligaciones, cuotas de colegios, profesores particulares, clases de idioma y actividades extras como fútbol, rugby o danzas, entre una lista que puede llegar a ser larga según cada familia. A eso se suma la compra de textos escolares que también ponen su granito de arena a lituación financiera.
Desde hace unos años, y efecto directo de la inflación, cada marzo viene con la incógnita de no saber con cuánto ajuste llegaran las boletas de pago. “Un dato a tener muy en cuenta será la evolución de las paritarias salariales”, dice Héctor Rubini, economista del departamento de investigación económica de la Universidad de El Salvador. “Algunos gremios docentes han rechazado incrementos salariales del orden del 25%/ 28%, y los empleados de sector salud de la provincia de Buenos Aires ya exigen aumentos del orden del 40%”.
Desde el próximo mes las empresas de medicina prepaga tienen autorizado por el Gobierno un incremento del 4% en sus cuotas, aunque probablemente no será el único del 2015. Seguramente se seguirá un esquema similar al del año pasado, cuando se dio luz verde a aumentos en los meses de junio, septiembre y diciembre. Consultores privados estiman que en total rondará entre 28% y 30% en el año (en 2014 fue del 25%).
Los colegios, dependiendo si tienen o no alguna subvención estatal, tendrían aumentos de hasta un 40% en la cuota del mes de marzo, respecto de la última paga en diciembre. Incluso, algunas escuelas ya avisaron mediante cartas a los padres este incremento el año pasado. De todos modos, el impacto real no se conocerá hasta que se cierren las paritarias docentes. Atención: no entusiasmarse si se demora a abril… porque el aumento de todos modos será retroactivo a marzo.
Las negociaciones salariales de cada uno de los gremios están a medio camino, pero a estar atentos porque el entorno económico se verá reflejado en nuestras billeteras y éste no siempre está en relación directa con la modificación salarial que hayamos obtenido de nuestros empleadores.
Recomendación: lo mejor para preservar el equilibrio financiero es esperar, al menos, hasta abril para tomar nuevos compromisos que impliquen el pago de cuotas mensuales tales como gimnasios, clases de arte o música para los chicos. Hay cuentas que son impostergables (colegio, salud, seguros), pero antes de tomar la decisión de sumarla a nuestros gastos, tenemos que estar seguros que el presupuesto se puede mantener en equilibrio.