“Vivir no es sólo existir, sino existir y crear, saber gozar y sufrir y no dormir sin soñar. Descansar, es empezar a morir”. La famosa cita de Gregorio Marañón es una pincelada llena de color dentro de la caracterización de las mociones que mueven a un buen líder. Aquél que camina primero, que sabe hacer silencio y se considera realista, pero sobrenaturalmente realista. Al líder le gustan las cosas claras y transparentes, las palabras con sentido y la mirada que no titubea.

El líder lleva zapatos gastados, porque camina la tierra y conoce la realidad que lo rodea. Se caracteriza por su perfil multitasking, porque está donde lo necesitan, desempeñando bien cualquier trabajo. Se esfuerza para que nada sea demasiado para él y, más importante aún, para que nada le quede chico. El líder valora el trabajo en su sentido abstracto, el esfuerzo y el tiempo que conlleva, el potencial que de él se deriva y el crecimiento que se produce en la persona que desarrolla una tarea, sea cual sea.

Eidico tuvo la suerte de esponsorear el Human Camp, un encuentro inspiracional que está revolucionando el liderazgo mediante el intercambio de experiencias y la generación de debates sobre la gestión del capital humano. La propuesta de participar del mismo nos conmovió profundamente, porque sentimos una afinidad muy fuerte con la misión de este evento. A medida que nos detallaban los puntos que el Human Camp sostenía, la imagen de los primeros suscriptores de Santa María de Tigre se iba volviendo más nítida en nuestras mentes. Porque nuestro primer lanzamiento fue simplemente un escenario ilógico: dos hombres prometiendo un barrio sobre un bañado. ¿Qué fue lo que llevó a esa gente a apostar en esas palabras sueltas? La confianza en esos hombres que comprendían la situación del país y buscaban lo mejor para todos. Y esto es lo que define al liderazgo que queremos potenciar puertas adentro: la imaginación para pensar una idea, la capacidad de ejecutarla y la perseverancia, transparencia y convicción para llevarla a cabo, cuidando la confianza de los que se acercan.

El foco del evento estuvo puesto en uno de los mayores desafíos que debe enfrentar un líder en la actualidad: lograr equipos de trabajo entusiastas, que vean en su trabajo la posibilidad de brindar una ayuda a los demás. Mateo Salinas, el gerente general de Eidico, presentará en el Human Camp con sede en Rosario su propio testimonio. En el evento de agosto se contará la historia de cómo la palabra de un puñado de líderes se volvió realidad, y cómo desde una empresa se puede formar personas para convertirlas en los nuevos líderes del mañana.