Hace más de 14 años no era más que eso: un sueño. El secreto para cumplir un sueño es empezar. Así fue que el dueño decidió compartirlo y convocar a otros a que juntos creyeran y apostaran por un proyecto educativo. Para eso fue importante poner sobre la mesa que se puede pensar, opinar y actuar distinto, y a pesar de eso se puede compartir y construir una idea a futuro.

Así fue como EIDICO, MIERES Propiedades, Cardón, Miguens Hermanos y JP Urruti & Asociados crearon Fundación Oficios y forman parte de su Consejo de Administración.

¿Cuál es nuestra visión?

Desarrollar un sistema de escuela de oficios modelo en la cultura del trabajo, el desarrollo integral del individuo y la formación ciudadana.

Originalmente empezamos a trabajar en Benavídez. Años más tarde iniciamos acciones en Rincón de Milberg (2010), Derqui y el Complejo Penitenciario San Martín (2015), Rojas (2017) y Villa 31 (2019).

Nos vinculamos con el sistema educativo de la Provincia de Buenos Aires desde 2012 para poder entregar certificados oficiales, además de contar con apoyo económico para llegar a más personas.

¿Qué tienen de especial?

Tenemos una mirada crítica de la pobreza. Sabemos que es un fenómeno social que percude a las personas.

¿Cómo creen que opera la pobreza en la vida de las personas?

Hemos podido ver y constatar que vivir mucho tiempo en esas condiciones genera hábitos de supervivencia, círculos viciosos que se repiten. Falta de recursos materiales, urgencias, imposibilidad de sostener a los hijos en la escuela, acceso precoz de los hijos al mundo del trabajo o a buscar recursos en la calle, trabajos mal remunerados por falta de calificación, bajos ingresos, conformación de familias a corta edad, falta de recursos materiales, urgencias, y repetición de ciclos.

 Lo que ustedes hacen, ¿genera algún cambio?

Sí, aunque sólo podemos hablar por los más de 5.000 egresados que pasaron por nuestras aulas. La formación integral en oficios permite que quien salió de la educación de manera prematura, vuelva pero con la validación inmediata de contar con un saber útil. A eso hay que sumarle que es gratis, que siempre hay clases. También se suman nuestro respeto, acompañamiento y vocación institucional (preocupación permanente por mejorar), la vinculación con el entorno, el reconocimiento social del logro una vez egresados y nuestra vinculación con el entorno productivo.

¿Qué hace falta para que Fundación Oficios venga a mi barrio? ¿Cómo se logra abrir una sede?

Dictar cursos gratuitos en oficios requiere de un fuerte compromiso. Se debe trabajar para recomponer el ánimo y la dignidad de las personas. Acercar oportunidades de inclusión social y laboral. Requiere de un alto nivel de inversión económica en la comunidad y sin un retorno mayor al deber cumplido.

Quienes participan, apoyan y acompañan a la Fundación, forman parte de un proyecto educativo que requiere de una mirada a mediano y largo plazo. Y para esto es fundamental no perder el foco en lo importante más allá de lo urgente. Trabajar en contextos de pobreza, marginación y/o exclusión, puede presentar oportunidades de distracción y/o dispersión.

Lo hacemos convencidos de que un país con más oportunidades es un país con futuro[1]. Y para eso es necesario romper con el status quo o con la inercia de no hacer nada para que las cosas cambien.

Es así que empresas como NS Desarrollos aporta dinero, ideas y proyectos, al igual que Agropecuaria Cantomi. Desde nuestros inicios hemos trabajado con la Fundación UOCRA, empresas vinculadas a los oficios que dictamos, la iglesia católica y la evangélica, asociaciones vecinales, ONGs (Fundación Espartanos, CONIN). Empresarios, influencers, pequeños y grandes emprendedores, voluntarios, muchas instituciones se han sumado y se siguen sumando. Ayudanos a acercar una oportunidad más.

No esperes más. Sumate.

[1] En la actualidad hay más de 12.000.000 argentinos que no terminaron la educación secundaria. De cara al mercado de trabajo cuentan con un perfil no calificado que accede a trabajos de baja remuneración. La principal causa de abandono escolar es la falta de dinero en las familias para sostener la educación de sus hijos. Más conocimientos y calificación de los padres representa más oportunidades de acceder a mejores remuneraciones, más allá de las cuestiones simbólicas de acceder a un título.

Sergio Moreno, Director Ejecutivo de Fundación Oficios